A orillas del Urdaibai, los y las Trebeak de Berribide hemos vivido un campamento que nos ha permitido reconectar con la naturaleza y con nosotras mismas. Acampados en un entorno privilegiado, compartimos reflexiones, juegos y desafíos que nos ayudaron a crecer como grupo y a reforzar nuestro compromiso eskaut.
Cada mañana comenzaba con la brisa del mar y cada noche acababa con el murmullo de las olas, recordándonos la fuerza de la naturaleza y la importancia de cuidarla. Las dinámicas y debates nos hicieron repensar nuestro papel en el grupo y en el mundo, mientras que las veladas y las risas nos unieron aún más.
Aquí os dejamos algunas fotos que recogen la esencia de estos días: la calma de la ría, la fuerza de las mareas y la energía de un grupo que no deja de soñar y construir. ¡Hasta la próxima aventura!